Comienza así una etapa diferente en mi trayecto artístico, descubriendo todas las posibilidades que la piedra litográfica brinda en contacto con la aguada, el lápiz y la pluma, herramientas fundamentales en darle expresión a este lenguaje.
También es una experiencia vital, nueva que dándole posibilidades de liberar y recorrer caminos que se cruzan y se modifican constantemente. Suma después texturas y materia donde la madera, el metal y la arcilla expanden la expresión en constante cambio y transformación.